Procedente de Holanda
El cálao bicorne es una de las aves más singulares y características de las selvas
tropicales de India, Nepal, Bután y el Sudeste Asiático. Amenazada por la caza furtiva y convertida posteriormente en esta exótica ave es todo un reto para la misión de centros de conservación como BIOPARC Fuengirola.
En los últimos años, los EEP de la EAZA apenas han registrado nacimientos de esta especie, por lo que los parques aúnan esfuerzos para corregir esta tendencia y garantizar la población futura de los cálaos. Con este objetivo, el parque malagueño ha recibido esta semana una hembra de cálao bicorne procedente del centro holandés, Vogelpark Avifauna.
Con la llegada de esta hembra intentaremos conformar una pareja. Ahora solo queda esperar para ver cómo es el acercamiento entre ellos y la adaptación de la cálao a su nuevo entorno, explica Rosa Martínez, veterinaria de Bioparc Fuengirola.
Las introducciones de los cálaos, debido a la distinta personalidad y la posible agresividad que pueden tener entre ellos, tienen que ser paulatinas. Por este motivo, el equipo de Zoología y Veterinaria cuenta con un protocolo en el que el acercamiento va de menos a más, hasta ver la aceptación entre ambos individuos.
“En este proceso primero tienen que oírse, después verse, pero sin acceso el uno al otro para que no puedan agredirse. Después se ponen en contacto protegido, a través de una malla, en la que pueden interaccionar más, y empezar a pasarse comida el uno al otro, si todo va bien. Poco a poco, según vayamos viendo cuáles son sus comportamientos y sin son compatibles, se procede al siguiente paso: juntarlos en un mismo espacio, sin barreras”.
Una vez terminada esta adaptación, las personas que visiten Bioparc Fuengirola, podrán
contemplar esta pareja de cálaos bicornes en los aviarios exteriores. El peculiar cortejo y puesta de cálaos: un gran reto para el equipo Parte del reto con estas aves está en su reproducción, un proceso lleno de particularidades. Aquí las hembras son muy selectivas, la estimulación que logre el macho es fundamental para que esta ovule y ponga huevos fertilizados.
El cortejo se inicia con un juego de aleteo y un acercamiento entre ellos. Durante los días que dure este proceso, el macho coquetea con la hembra, juega con ella y le da pequeños ‘regalos’ en forma de alimento. Una vez que la hembra acepte al macho, se aparearán.
“En el caso de los cálaos, el macho tiene que convencer a la hembra de que es el adecuado. En el caso de que finalmente haya una puesta, su vida y la de los polluelos dependerá al cien por cien de él. Será el responsable de alimentar y proteger a la hembra y a las crías”, destaca Martínez.
Tras copular, la hembra de cálao se refugia en la cavidad de un árbol para la puesta de huevos y no sale de este hasta que los polluelos han crecido. La salida es sellada por completo por la pareja, a excepción de un pequeño hueco a través del cual el macho alimenta a la hembra y a sus crías. En la naturaleza, si muere el macho, también lo harán estos.
Tres programas de conservación diferentes dedicados a los cálaos
En 2018, Bioparc Fuengirola ampliaba el número de programas de conservación en los que participaba dentro de la EAZA con tres EEP dedicados a la preservación y protección de
tres especies de cálaos: el cálao bicorne, el cálao de Papúa y el cálao gorginegro. De esta
forma, el parque de animales malagueño se sitúa como uno de los más activos de España en la conservación de estas exóticas aves, albergando cuatro de las dieciséis especies descritas hoy día, todas ellas amenazadas.
En el caso de los cálaos bicornes, según los datos facilitados por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), en las últimas décadas, esta especie ha desaparecido en decenas de puntos diferentes, incluido en los propios espacios protegidos. Este organismo los cataloga como ‘vulnerables’ y con una población en continuo decrecimiento, debido sobre todo a la caza furtiva de ejemplares, pero también a la desaparición de la masa forestal que les da hogar, también por causas humanas.